Con el hambre de sumar la primera victoria de la campaña se enfrentaban en el Carlos Tartiere el CD Lugo y el Real Oviedo. Para los albivermellos, además de lograr los primeros tres puntos, existía el alicinte de romper con un malefiio: el Lugo nunca había ganado en Oviedo en LaLiga SmartBank. Y pese a qe los lucenses hicieron méritos, la victoria sigue resistiéndose en el feudo ovetense.
Para afrontar el reto Eloy Jiménez repetía el mismo 11 que la semana anterior firmó un puto en el estreno liguero frente al Extremadura en el Anxo Carro. Por su parte, Sergio Egea pudo contar con todos los inscritos de última hora en la convocatoria.
No se cansó de advertir el técnico albivermello en los días previos del peligro ovetense en l juego físico y los balones aéreos. Y como si de un vaticinio se tratase, Ortuño no tardó ni cinco minutos en darle razón al de Hellín. Un balón al primer palo en un saque de esquina erá peinado por el tanque carbayón para adelantar a los asturianos. Efectividad extrema par los locales que se adelantaban en la primera ocasión de la que dispusieron.
El Lugo, ya antes del tanto dió evidencias, no viajó hasta Oviedo para bajar los brazos de buenas a primeras y fue ambicioso en todo momento. Poco después del tanto oventense tuvo un mano a mano Herrera frente Alfonso que el meta local supo tapar. Acto seguido un centro de Tete se paseó por el área pequeña sin que Manu y Cristian pudiesen empujar el balón dentro de la portería. Herrero se agigantaba por momentos y sacaba una mano abajo a un disparo desde la frontal de Barreiro, repelía un disparo de Campabadal tras un rechace en el área y también abortaba otra intentona de Herrera desde fuera.
En un campo cerrado como el Tartiere, con la afición apretando, los de Egea se britanizaban por momentos. El juego aéreo y la estrategia eran su respuesta ante el dominio lucense. Cada córner se jaleaba con intensidad por parte de la parroquia local. Pudo hacer mucho más profunda la herida Tejera si remacha un centro al corazón del área que el medio, más acostumbrado a otras faenas, mandó el balón por arriba de la meta de Varo.
Siguieron mostrando una cara atrevida los de Eloy en la reanudación, avisando con una doble ocasión de Manu y Herrera. Sólo faltaba acertar, porque ocasiones no faltaban. Más de cara se puso el duelo cuando López Toca mostraba la segunda amarilla a Juanjo Nieto en el 48. El campo se inclinaba mucho más hacia la meta carbayona y el Lugo, que olía sangre, buscaba un empate que ya había merecido sobradamente. Egea ajustaba al equipo dando entrada a Johannesson y Eloy Jiménez hacía debutar a un Álex López que fue protagonista del desenlace del duelo.
Todo parecía encimanarse hacia la igualada lucense hasta que el colegiado cántabro enseñaba la segunda amarilla a Canella y equilibraba numéricamente la contienda. El ritmo del partido decayó un poco pero el conjunto amurallado no bajaba los brazo y seguía buscando paciente la igualada. Por su parte los locales, con la entrada de Obeng y Bárcenas buscaban sentenciar corriendo a la contra.
Fue un ejercicio de paciencia que al final tuvo premio porque, ya dentro del descuento, Álex López probaba a Alfonso tras conducir el balón con un disparo desde fruera del área. Y ahí, Herrera fue le más listo para recoger el rechace del meta de los ovetenses y firmar la igualada . Un punto de valor por el escenario y las circunstancias, que premiaba a un valiente lugo que buscará su primera victoria de la campaña el próximo domingo ante la AD Alcorcón.