El CD Lugo regresaba al Anxo Carro con la misión de confirmar juego y sensaciones ante el CA Osasuna Promesas. El equipo de Alves saltaba al verde con esquema ya conocido y las novedades en el once de Aguza en zona medular, y de Mario Da Costa por banda derecha. Inicio intenso, con ritmo alto de juego y un equipo local con la batuta del encuentro desde primeros compases. Juego ágil, y bloque adelantado para generar juego en campo rival, con balón y ocasiones para los lucenses. La presión alta de los locales iba a generar pronto su primera consecuencia con el gol de Mario Da Costa, aprovechando una entrega defectuosa del central rival sobre el meta rojillo, que el extremo transformaría en el tanto de la ventaja para el CD Lugo.
Gol merecido, y grandes sensaciones en una primera parte en la que los de Alves equilibrarían a la perfección trabajo defensivo con presencia en área rival y llegadas de peligro. Con una intervención de mérito de Lucas a disparo de Svensson como único botín en ataque para los navarros, los amurallados acumularían hasta cuatro ocasiones claras sobre marco rival. Willy y Aranda rozaban el gol en sendas aproximaciones claras que Dimitros salvaba sobre la línea con el campo a punto de cantar el tanto, y el juego generado por los hombres de zona medular situaba al conjunto lucense como dueño del balón, tanto en construcción ordenada, como en transiciones tras recuperación. Primera parte de alto valor para un equipo dominador y consistente en todas las facetas del juego.
La segunda mitad continuaba con el guion visto en su predecesora. El CD Lugo acumulaba las mejores ocasiones y continuaba liderando el choque con autoridad. Mario Da Costa se asomaba de nuevo al gol, y estrellaba su remate en el larguero en un lanzamiento de quilates al que sólo la fortuna separó de las mallas. El choque intensificaba la disputa, y Mérida, Antoñín y Antonetti hacían su entrada en el verde en busca de oportunidades de crecimiento y gol. Pese al dominio de los locales, el filial de Osasuna lograría igualar en este tramo, gracias al buen tanto de Buján, que igualaba el duelo en su momento de mayor disputa.
El tramo final de choque ofrecería la versión más ofensiva de un CD Lugo que buscó con todo la victoria, adelantando bloque y líneas sobre mitad rival con la misión de acumular efectivos en zonas de remate. Los de Alves alternaban juego directo con tandas de pases encadenados sobre área de creación, sometiendo a un rival que legaba sus opciones a contragolpes puntuales desde larga distancia. Antonetti gozaba de las mejores oportunidades en últimos metros y se erigía en referencia de un ataque que no perdía la esperanza en conseguir el gol de la victoria. Pese a los esfuerzos realizados, el marcador no se movería finalmente, y los puntos quedaban repartidos entre ambos rivales.