El CD Lugo continuaba con su pretemporada en el día de hoy, en el clásico veraniego del Emma Cuervo. Un duelo ya tradicional en el calendario futbolístico, y que enfrentaba en esta ocasión a los de Rubén Albés con el Real Oviedo. Choque de categoría en el que el conjunto albivermello dispondría de un once de garantías para comenzar, formado por Vieites en portería; Torrado, Alende, Vesprini y Lebedenko en línea de defensa; Pita, Borja D. y Juanpe en medular; Ramos, Carrillo y Leandro en punta de ataque. Enfrente, un Real Oviedo compacto, con los Costas, Sangalli, Mier o Grippo, como puntales sobre el verde. Choque de buen nivel desde el comienzo, con dos equipos en busca de la conquista de los espacios, priorizando el posicionamiento sobre el avance veloz.
La primera mitad se mantendría disputada y ajustada desde compases iniciales. El Real Oviedo gozaba de las ocasiones más claras, principalmente en botas de un inspirado Sangalli, en sendos disparos que obligaron a la intervención de un inspirado Fran Vieites. El CD Lugo se mostraba firme en defensa, e incisivo en ataque, resolviendo los envites azulones con contundencia, y buscando en velocidad la incorporación de sus hombres de ataque, bien vigilados por la zaga de Cuco Ziganda. Primera mitad de ida y vuelta, en la que los amurallados demostraron seguridad en todos los lances del juego, y en la que trataron de optimizar su juego directo sobre la posición de Carrillo para ganar metros. Pese al esfuerzo realizado por parte lucense, sería el Real Oviedo el encargado de golpear primero, gracias al tanto de Javi Mier. Contratiempo rápidamente resuelto por los de Albés que, merced a la velocidad de Antonettí, anticipándose a Femenías en su salida, e introduciendo su cabeza en un sutil toque sobre el meta a pase de Borja, ponía la igualdad en el electrónico. Empate merecido para emprender el camino a vestuarios.
La segunda mitad arrancaba pareja, similar a su antecesora, con ambos conjuntos buscando el crecimiento sobre el verde, aunque sin argumentos decisivos en el arranque para la descompensación. El CD Lugo movía su banquillo y daba entrada a Alberto Rodríguez y Hugo Rama con el objetivo de refrescar líneas para mantener el plan inicial. Fortaleza defensiva, sentido práctico en la recuperación, y salida veloz por costados para desbordar a la ordenada defensa asturiana. Buen trabajo de equilibrio por parte de los de Albés, compitiendo con rigor en cada duelo, en busca de ocasiones para adelantarse en el marcador.
El conjunto amurallado continuaba con su carrusel de cambios en la segunda parte, y hombres como Barreiro, Valentín, Campabadal o Ros hacían su ingreso en el terreno de juego para buscar la ventaja frente a un rival sin fisuras en la tarde de hoy. El tramo final del acto conservaría el duelo por la ocupación de los espacios, sin conceder ocasiones claras de gol para ninguno de los dos contrincantes. Llegados al filo de la conclusión, Fran Vieites se encargaba de desbaratar con una gran intervención el único disparo peligroso del rival, manteniendo el resultado gafas en el Pepe Barrera.
La tanda de penaltis resultante del empate concedió finalmente el triunfo al CD Lugo. Fernando Seoane anotaba el último y definitivo tanto, gracias al cuál el equipo albivermello se hacía con la presente edición del Emma Cuervo.
