Skip to main content
Otras

CD Lugo 3-1 RCD Mallorca

Victoria de quilates de los hombres de Luís César, tras remontar el tanto inicial de los bermellones

Aún no hay reacciones. ¡Sé el primero!

Partido de dinámicas enfrentadas el que esta tarde medía en el Anxo Carro al CD Lugo y al RCD Mallorca, en un choque de importancia vital en el caso de los baleares, necesitados de una reactivación en su racha de resultados. Por parte del conjunto amurallado, muchas expectativas, la meta de mantener la imbatibilidad en liga, y la opción de encaramarse a lo alto de la tabla clasificatoria. Arrancaba el choque muy de cara para los visitantes cuando, recién comenzado el encuentro, Brandon aprovechaba un error defensivo en un saque de esquina para hacer el primero de la tarde. Jarro de agua fría para los locales y la obligación de remar a contracorriente para enderezar el rumbo.

El CD Lugo reaccionó con velocidad al golpe, y dispuso todo lo necesario para retomar la iniciativa en el juego, dominando a un rival que se veía superado por el juego combinativo de los de Luis César. Tras varios minutos de tentativas y acercamientos peligrosos, sería Carlos Pita quien, tras recoger un rechace en el área, colocaba con calidad su disparo con pierna izquierda en la base del poste, haciendo inútil la estirada de un Cabrero que veía como el empate subía al marcador.

Los pupilos de Luis César mandaban en el partido, generando mucho fútbol a partir de la salida desde campo propio, y obligando al rival a un ejercicio de presión infructuoso, y que terminaba por encerrar al bloque en su mitad. Tras dos ocasiones, una para cada equipo, en botas de Joselu y Moutinho, el partido volvía a entrar en una nueva fase decisiva que iba a determinar la ventaja del CD Lugo sobre su rival. Aprovechando una rápida salida, tras rechazar un saque de esquina de los bermellones, Pedraza rompía en velocidad por carriles interiores, avanzando sin oposición hacia los dominios de Cabrero, y cediendo para la llegada de Joselu que, por bajo, batía al meta visitante con precisión y calidad.

El equipo amurallado cristalizaba sus ocasiones, y conseguía traducir el dominio de posesión y ritmo de juego en dos tantos que hacían justicia a la apuesta ofrecida en faceta ofensiva. Con todo, la primera mitad se cerraba con dos grandes intervenciones de José Juan, a remates de Brandon y Lago Junior; el meta evitaba con reflejos la igualada, manteniendo a los locales con la ventaja en el electrónico.

La segunda parte echaba a andar con el mismo guión y disposición de actores visto en el primer acto. Con un RCD Mallorca más correoso e intenso, las dificultades para la transición y el crecimiento ordenado con balón aumentaban para el CD Lugo. Pese a eso, el control de la posesión y la iniciativa seguía de parte de los albivermellos, que tenían en el sistema de apoyos de medios y hombres exteriores, su gran arma para superar las líneas de presión de un rival que perseguía con ahínco sus opciones de empate.

El partido maduraba, y con él, el CD Lugo seguía aumentando prestaciones y creciendo en efectividad y llegada. El camino sólo tenía un destino, y de nuevo, sería Joselu la brújula para encontrar el gol. Rápido y preciso, el punta conectaba una tijera de manual tras envío cruzado, consiguiendo el tercero de la tarde para los locales, y refrendando una ventaja que ya se antojaba decisiva de cara al tramo final de encuentro. El CD Lugo veía premiada una actuación global a lo largo de un choque en el que estaba siendo mejor que su rival en todas las facetas del juego.

Perea, Sergio Gil y Caballero hacían su ingreso en esta segunda mitad, y con ello, el equipo de Luis César dejaba claras sus intenciones de búsqueda ofensiva, manteniendo con convicción su perfil atacante ante un rival cada vez más apremiado por el cronómetro. Los albivermellos siguieron intentando la entrada, bien tras combinación rápida en carril interior, bien en certeras incorporaciones por banda, suerte en la que destacó sobremanera un inspirado Calavera, que volvió a ejercer de alternativa en ataque junto a Iriome, otro puñal en el ataque a los espacios que el rival dejaba en sus intentos de llegada. Equilibrio entre vanguardia y defensa, control en el manejo de la posesión, y una gestión impecable de los esfuerzos en la presión tras pérdida y en el aprovechamiento de la amplitud del campo, resultaron ingredientes más que correctos para cocinar una victoria de mérito ante uno de los siempre favoritos al ascenso.

Con el pitido final concluía una choque, de resultado muy positivo para los intereses de un CD Lugo que sigue en lo alto de la tabla, sumando tres puntos importantes en casa, y defendiendo una propuesta de juego atractiva, y de alta efectividad. Los hombres de Luis César eran despedidos entre aplausos, por un estadio que ovacionó la actuación de un equipo que sigue consolidando, jornada a jornada, una línea de juego y resultados magnífica hasta el momento.

Image